Descubre la isla Coelleira y su leyenda
La isla Coelleira es la más grande de Lugo, con sus 26 hectáreas de superficie. Pero no es esto lo que la hace atractiva, sino su impresionante belleza y una leyenda misteriosa que la rodea. Se encuentra a menos de una hora de Foz en coche, por lo que es imperdonable que no vayas a conocer esta maravilla de la naturaleza.
Cómo es la isla Coelleira
Su forma es la de un trapecio irregular y más que erigirse sobre el mar, parece estar hundiéndose. Alcanza los 80 metros sobre las aguas del Cantábrico y su punto más alto es un faro que la corona. Aunque este no es de gran relevancia, sí es un atractivo que hay que ver, ya que aporta un toque pintoresco a la isla.
La isla no está habitada, pero se puede llegar a ella en una lancha. Desde allí tendrás unas vistas impresionantes de la costa, podrás visitar su faro y hacerte unas fotos de infarto. Lo único que podrás ver en ella es hierba, aunque se cuenta que antaño hubieron muchos conejos, motivo por que el que tiene ese nombre, Coelleira, que en gallego significa conejera.
Historia de la isla Coelleira
La primera mención que se hizo de esta isla fue en el siglo XI, cuando se hicieron donaciones a un monasterio existente en la zona. Este monasterio tiene mucho que ver con la leyenda que más adelante te contaremos. Ya el siglo XV se produjo una unión del monasterio de Coelleira con San Martín de Mondoñedo, aunque se cree que unos años después desapareció el edificio monacal.
¿Qué leyenda rodea a esta isla y su monasterio? De eso mismo vamos a hablar ahora. No sabemos si te despiertan la curiosidad, pero a nosotros las leyendas nos encantan. Vamos a ello.
La leyenda de isla Coelleira
A pesar de que los primeros documentos que hablaban de la isla datan del siglo XI, parece que hay constancia de que monjes ya la habitaban en el siglo V, los cuales levantaron varias casas para habitar en ella. El paso de los años, las guerras y las revoluciones no pasaron desapercibidas para esta isla y su monasterio, pues los templarios pronto se hicieron con ella.
Esta conocida Orden de los caballeros del Temple tenía el fin de cuidar y proteger a los peregrinos y religiosos de los lugares santos de los salteadores sarracenos. ¿Qué los llevó a habitar el monasterio de San Miguel de la Coelleira?
Pues todo parece indicar que tuvo mucho que ver con la cruel persecución que sufrieron por orden del rey de Francia, Felipe el Hermoso. Este parecía el lugar ideal para esconderse y proteger su vida. No obstante, unos años después abandonaron el monasterio y, aunque no parece haber causas por las que sucedió esto, hay quienes afirman que una noche se oyó tocar la campana y algunos verdugos entraron a degollar a todos los monjes.
¿Realidad o leyenda?
Pinturas sobre este martirio, así como escritos y libros, dan fe de este acontecimiento, aunque muchos crean que tan solo es un mito. Dice la leyenda, que de este ‘asesinato masivo’, uno de los monjes salió ileso y se refugió en una casa de Viñedo, una localidad lucense. Lo hizo vestido de paisano por temor a perder su vida y aún hoy queda algo en esta localidad relacionado con la leyenda: la Casa do Paisano.
La leyenda continúa diciendo que San Esteban es el patrón de O Vicedo porque este religioso llevó una pintura del santo a la iglesia de San Román, para más tarde trasladarlo y venerarlo en la parroquia de San Esteban. Pero esta leyenda no termina, pues un noble aseguró haber sido el responsable de la muerte de los monjes y dejó escritas las palabras:
“Dejo treinta y seis misas para bien de las almas de treinta y seis frailes que, por orden del Rey Felipe el Hermoso he mandado degollar en la isla de Coelleira.”
¿Qué habrá de verdad en toda esta leyenda? Lo mejor es que vayas a esta isla y quizá puedas descubrirlo, a veces la naturaleza nos cuenta secretos con su silencio.