Vamos a recorrer la Vía Verde del Eo
El río Eo ha sido ha servido de frontera y también de unión entre los territorios de Galicia y de Asturias. Es un cauce rodeado de una riqueza natural espectacular y que merece la pena conocer. Y no solo por sus valores naturales, también por su historia, parte de la cual podemos descubrir recorriendo la Vía Verde del Eo.
Orígenes de la Vía Verde del Eo
El siglo XIX, sin duda, fue el siglo de la minería, por todos los lugares de España se abrieron minas para extraer los más variados materiales de las entrañas de la tierra. Eso tuvo una especial presencia en todo el norte, y también aquí, en la Mariña Lucense.
En el tramo alto del río Eo se abrieron minas. Tras eso, y para comercializar el mineral, se decidió construir un ferrocarril que lo transportara hasta Ribadeo. Donde se creó un embarcadero para poder cargar y embarcar el material hacia cualquier destino. Aquellas minas se cerraron en los años 60 del pasado siglo, e inmediatamente desapareció el ferrocarril.
Pero hoy se le rinde homenaje con esta Vía Verde del Eo, que sigue el trazado del tren y atraviesa los túneles que cruzaban los vagones cargados de hierro. Además de que en ciertos puntos del recorrido, como Ribadeo, San Tirso de Abres o Pontenova, quedan restos materiales de aquella actividad minera y ferroviaria. Os lo vamos a mostrar remontando el recorrido de esta Vía Verde del Eo:
Ribadeo
En realidad, los últimos tramos del trazado que llegaban hasta la ría y a Ribadeo han desaparecido o son impracticables. No obstante, cuando hagáis la excursión hasta esta localidad de la Mariña Lucense veréis una zona que se llama todavía Cargadoiro. Pues bien, este era el punto final del trayecto ferroviario y allí se procedía a embarcar el mineral.
Hoy en día ese paraje está rehabilitado, contando su historia y su importancia. Además de que es uno de los sitios idóneos para disfrutar con las vistas de la ría.
San Tirso de Abres
En realidad, nuestro recorrido físico de la Vía Verde del Eo puede comenzar en la localidad asturiana de San Tirso de Abres. Muy cerca de la población comienza el trazado de 24 kilómetros que nos llevará hasta A Pontenova, de nuevo en territorio gallego. Sí, has oído bien, son 24 kilómetros.
Por cierto, en San Tirso de Abres se pueden ver varias construcciones cerca del viejo trazado. Una de ellas era la antigua estación, que hoy es una vivienda particular. Y también hay un viejo vagón, transformado en la oficina turística de la localidad.
El trayecto
Los 24 kilómetros que nos esperan van pasando por diferentes túneles, así como nos vamos acercando o alejando del cauce del río Eo. E incluso lo cruzamos por un antiguo puente ferroviario o vemos una vieja estación hidroeléctrica compuesta por diferentes saltos de agua.
También durante el recorrido vamos viendo algunas zonas todavía con traviesas o con los balastos que eran la base del recorrido ferroviario. Así, sin darnos cuenta, la Vía Verde del Eo va abandonando Asturias y se adentra en Galicia, donde el trazado ya está asfaltado y compartido con vehículos a motor.
A Pontenova
Esta localidad es nuestro destino final. La Vía Verde atraviesa el pueblo y nos lleva hasta las propias minas de hierro. Allí hay un gran parque y podemos ver los restos de aquella explotación y los hornos.
En fin, recorrer la Vía Verde del Eo es una actividad deportiva, cultural y natural de lo más entretenida. Una actividad que podéis hacer caminando, si contáis con dos coches para evitaros la vuelta. O se puede hacer con bicis de montaña. En cualquiera de los caso, disfrutarla a tope.
Fotografía principal: JCNazza / Wikimedia Commons